Jaque Mate de la Muerte
Te despiertas como
cada mañana y un día más pones en marcha el protocolo de tus costumbres
diarias Pero de pronto recibes una
llamada que rompe esa rutina diaria y el
menú de emociones de ese día cambia inesperadamente; sustituyendo la
tranquilidad por el desconcierto. En cuestión de segundos tu temperatura
corporal sufre un bajón desmesurado hasta el punto de no sentir ni siquiera el
frio.
Nunca antes habías imaginado este momento. Pero es real;
esa persona que durante años ha ocupado un lugar importante en tu vida ha
muerto. Si…..MUERTO. Sin posibilidad de predecirlo. Ya no volverás
a verl@ más, a escucharl@…. Se acabó.
Así de tajante y frívola es la situación frente a la que te encuentras
un día cualquiera.
Aún no consigues
confirmar si de pronto el mundo se ha
vuelto del revés, estas en mitad de una pesadilla de la que falta poco para
despertar o si este nuevo escenario desconocido y desenfocado es en el que
realmente estas.
No consigues
encontrar una postura que te haga sentir cómoda, el desasosiego se ha apoderado de tu sistema nervioso. Sientes
la necesidad de corroborar la veracidad de esa desafortunada noticia con la que
has amanecido.
Es cierto, él/ella
se ha marchado, sin avisar, sin despedirse. ¿Pero por qué? No es posible, esto
no es lo normal…. Un enjambre de preguntas sin respuesta lógica y sobretodo
convincente invade tu mente sin dar
tregua.
Sientes la
necesidad de huir a un lugar donde te sientas segura y el silencio sea tu
aliado. No quieres hablar con nadie, solo quieres escuchar el silencio y
pensar, asimilar……
Este día ha
marcado un punto de inflexión en tu vida. Todo ha cambiado, la vida ha cambiado tu escenario sin
preguntar. Poco a poco empiezas a intentar asimilar que él/ella ya no
está. No volverás a escuchar su voz,
tampoco disfrutarás de un abrazo, un beso… no volverás a intercambiar miradas,
mantener esas conversaciones infinitas…..Nada.
“¡Esto no me puede
estar pasando a mí!” te repites una y otra vez. Pero a medida que el tiempo
avanza todo confirma lo temido.
Las horas se
vuelven eternas, parece que los relojes se hayan parado. El mismo pensamiento
ocupa cada segundo. Miras alrededor y contemplas que el mundo sigue girando igual,
no se ha parado, excepto para ti.
La gente va y
viene por las calles, te parece que todos ellos son felices menos tú. Caminas
entre esa multitud pero irónicamente, te sientes muy sola entre tanta gente. Eres
diferente a todas esas personas. Sigues
caminando sin rumbo, sin ver nada…….simplemente por inercia, intentando huir de
ese dolor que no deja de oprimir tu corazón.
Llega el momento
de despejar la mínima duda de si todo se ha tratado de una equivocación y él/ella
aún sigue viv@.
Se acabó….ahí esta….él/ella
yace en una fría camilla. No consigues apartar la mirada durante un minuto,
supongo que será el tiempo de asimilación. Procuras ver que su expresión es de
paz, carente de sufrimiento. Parece que esa idea alivia un poco tu dolor. Te autoconvences
(o por lo menos lo intentas) de que está bien, descansando sin dolor alguno. No
dejas de pensar en que lo que estás viendo ahí no es más que “el traje” que esa
persona, que ha sido uno de los pilares
de tu vida, ha utilizado en esta vida. SI, eso es, lo que estás viendo solo es
el traje. Él/ella sigue vivo en tu recuerdo y sobretodo en tu corazón. Afirmaciones como “está descansando”,
“seguro que nos está viendo”, “no le gustaría vernos rotos de dolor”…… asoman
sin parar a nuestra mente con ánimo de retrasar el momento de romper a llorar
con un desconsuelo que no es nada fácil mitigar.
“Horror y Vacío “son el binomio adecuado para
describir la situación. Parece una broma macabra del destino……Bueno no, “broma
macabra” no…..más bien un “jaque mate de la muerte”, porque una broma del destino es cuando te confías en que ya no hay nadie en la calle y bajas a
tirar la basura vestida de “Maru” sin arreglarte, con las zapatillas con forma
de conejito y de repente en ese par de minutos aparecen personas conocidas que
para más inri te ven y se acercan a saludarte…. O cuando en plena sesión de
maquillaje para la cita de tu vida , sucede un apagón y te deja con un ojo maquillado
y el otro no hasta diez minutos antes de
llegar la cita……..Estas pueden ser bromas del destino…..pero que de la noche a
la mañana la muerte te arrebate a uno de los tuyos….???? Eso es un jaque mate
en toda regla! Porque no te da opción a realizar ningún movimiento para
salvarte.
Días después te adentras en el calvario de la elaboración
de preguntas retoricas. Intentas
convencerte a ti misma de que esa persona sabia cuanto la querías, que se ha “marchado”
sabiéndolo. Pero diez minutos después una sensación de inseguridad te abruma y
caes en el abismo de pensamientos oscuros. Montones de recuerdos asoman a tu mente….cambias
de la risa al llanto en cuestión de segundos. Pero lo que no cambia y cada vez
se acentúa mas es la sensación de culpa de no saber realmente como te ha
sentido durante estos años esta persona, como te has comportado con él/ella, si
le has fallado alguna vez, si has sabido demostrarle todo lo que sentías por él/ella……Todos
estos sentimientos van aumentando su intensidad según pasa el tiempo y al dolor
de echar de menos a quien no está , se le añade ese “sentimiento de culpa” por
tener la sensación de no haber hecho más de lo que hice por esa persona.
Según transcurren
los días te vas dando cuenta de lo que significa realmente la ausencia de una
persona querida. Del dolor que supone ese silencio ensordecedor entre ambos. El
llegar a casa y esperar a que en cualquier momento entre por la puerta, pero
acaba el día y no ha cruzado esa puerta. El sentarse a la mesa y comer junto a
esa silla “vacía”. Y sobre todo hay dos detalles que a mí personalmente me han
dolido mucho; no volver a escuchar su voz y no oler su esencia personal. Al principio te preocupa mucho el que llegue el día
en que te olvides de su cara, es una idea que ronda siempre. Pero después compruebas
que no ocurre, además siempre hay fotos en las que la puedes volver a encontrarla.
Aunque a algunas personas, se nos hace muy difícil navegar entre las fotos de
los que ya no están. A mí personalmente me cuesta mucho, no es lo mío, me crea
una sensación muy triste.
Pero…la voz? Esa es otra historia…..si no
existe alguna grabación, ya no dispones de ese comodín para sacarlo llegado el
momento. Abruma mucho imaginar que algún día no consigas recordar su voz….
Y su olor? Es algo
tan maravilloso oler cada día a esas personas de tu vida. El saber reconocer el
perfume de cada uno. El mismo miedo aparece cuando alguien se va….temes no
volver a sentir ese aroma. Y aunque existen los perfumes, no solo se trata de
oler el perfume que utilice alguien, sino que ese perfume siempre va acompañado del olor característico de cada uno
de nosotros. Es decir, los perfumes no sientan igual en todas las personas.
Frente a este miedo , te aferras a las prendas de él/ella porque allí va
impregnada su esencia…..y plantearte que llegue el momento que esas prendas
dejen de estar impregnadas por su esencia…asusta….Ese miedo a no sentir en
cierta manera a él/ella cerca de nosotros…..
Bien, todo esto
ocurre cuando no ha habido ningún mal rollo con la persona que hemos perdido.
Pero qué ocurre si además de perder a alguien tan importante para nosotros,
justo en ese preciso momento estábamos enfadados? O hacía tiempo que no le dedicábamos
tiempo y teníamos a esa persona un tanto descuidada...?
Tiene que ser
horrible. Sobre todo si la repentina marcha nos ha pillado en mitad de un
episodio de vanidad, prepotencia, orgullo….
La vida cambia en cuestión
de segundos…y nadie sabemos cuándo va a acabar la nuestra y la de los demás….No
merece la pena perder el tiempo con enfados y con tonterías cuando se trata de
personas a las que valoramos y queremos mucho ….porque mañana puede ser tarde
para pedir perdón. Muy tarde.
No solo les pasa a
los demás……ten presente que mañana puede que amanezcas como amanecí yo un 10 de
Diciembre, con la marcha de esa persona importante en tu vida.
Pronuncia sin miedo los TE QUIERO, TE NECESITO, ME ENCANTAS, TE
ECHO DE MENOS, ESTOY ORGULLOSA DE TI, GRACIAS…………….A menudo. Y cuando haya
alguna discusión, por muy persuasivo que parezca Don Orgullo…..mándalo a paseo
y no malgastes un solo día sin disfrutar de tu gente. No temas a decir LO SIENTO,
PERDONAME, DISCULPA……
Nadie muere
mientras se le recuerde pero es mucho mejor retrasar todo lo que podamos el
vivir entre recuerdos, y seguir creando recuerdos junto esas personas VIP que
nos van a acompañando por este camino que se llama VIDA.
Nunca des por
hecho un Te quiero, un Lo siento , un abrazo o un beso. PRONUNCIALOS y
REGALALOS…porque puede llegar el día en el que la dejadez de haberlos dado por
hecho se convierta en un lastre de por vida.
Esta entrada va
dedicada a mi hermano que perdí inesperadamente hace unos años. GRACIAS por
todo lo que me enseñaste en vida y por todo lo que me estás enseñando a través de
tu dura ausencia.
1 comentarios:
Gracias por dejarme conocerte mas a traves de tus lecturas.
Gracias por dedicarme tu tiempo
Gracias por ser tu
Gracias por el tiempo que cada dia me das
Y sobre todo Gracias por enseñarme ha decir LO SIENTO cuando me equivoco.
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio